Guía de cuidado para botas de snowboard y botines

Las botas de snowboard son una de las piezas más importantes del equipo que compramos como snowboarders.

Un mantenimiento regular, como lavar las botas de snowboard y secarlas adecuadamente, ayuda a que duren mucho más tiempo.

Puede que no sepas cómo limpiar las botas de nieve, pero al final de esta guía serás un experto en mantener tus botas como nuevas, tanto en aspecto como en olor. Y para que quede claro, esta no es una guía sobre cómo limpiar raquetas de nieve, botas de invierno o cómo guardarlas, aunque muchas de las reglas se aplican. Aquí hablamos exclusivamente de cómo lavar las botas de snowboard y cómo limpiar los botines interiores.

¿Cómo limpiar las botas de snowboard?

Limpiar tus botas de snowboard es un proceso sencillo que requiere equipo básico y algo de tiempo. Reserva al menos una hora para limpiarlas correctamente y al menos 24 horas para que se sequen.

Materiales necesarios:

Una vez tengas todo el equipo básico, es hora de remangarse y empezar a limpiar. Esta guía te enseñará todo lo que necesitas saber para mantener tus botas limpias y frescas durante toda la temporada.

¿Se pueden lavar los botines de las botas de snowboard?

Sí, puedes lavar los botines interiores de tus botas de snowboard. Lo más importante es seguir las instrucciones del fabricante respecto al lavado a máquina, tipo de detergente y sensibilidad al calor.

En general, se recomienda el lavado a mano, ya que en la lavadora podrían dañarse. Pueden encogerse o deformarse si se lavan o secan con calor, por eso es mejor usar agua fría y secado al aire.

Para la mayoría de las botas, un detergente normal es suficiente, pero si tienen membranas como Gore-Tex, Sympatex u otras, lo ideal es usar un limpiador específico como NikWax.

¿Cómo lavar las botas y los botines?

El primer paso es separar la carcasa exterior del botín interior. Para hacerlo:

1. Afloja los cordones, el sistema BOA, velcro u otro sistema de cierre que tengan tus botas.
2. Tira ligeramente de la lengüeta hacia adelante para hacer espacio.
3. Desliza la mano por la parte trasera entre la carcasa y el botín y agarra el botín desde lo más abajo posible.
4. Saca el botín inclinándolo suavemente hacia la lengüeta.
5. Por último, retira la plantilla del interior del botín.
6. Repite el proceso con ambas botas.

A continuación, lava por separado las carcasas, los botines y las plantillas.

Cómo lavar los botines y las plantillas

1. Llena un cubo con agua fría y un poco de detergente. Usa siempre agua fría, ya que los botines son sensibles al calor y podrían deformarse.
2. Introduce los botines y las plantillas en el cubo con agua jabonosa y déjalos en remojo durante al menos 15 minutos. Remueve el agua de vez en cuando con la mano.
3. Después del remojo, frótalos con una esponja.
4. Enjuágalos bien con agua fría.
5. Déjalos secar al sol, en un lugar ventilado o con un secador de botas. Nunca los pongas directamente sobre una fuente de calor, ya que pueden dañarse.

Cómo lavar las carcasas de las botas

1. Mientras los botines y las plantillas están en remojo, enjuaga las carcasas con agua para eliminar el exceso de suciedad.
2. Limpia las carcasas con una esponja y agua jabonosa. Usa el cepillo de dientes para las zonas difíciles o manchas incrustadas.
3. Sécalas con un paño y aplica el acondicionador impermeabilizante siguiendo las instrucciones del fabricante.
4. Algunos acondicionadores se aplican con la bota húmeda, otros requieren que esté completamente seca. Aplicar acondicionador rejuvenece la impermeabilidad y revitaliza el material.
5. Seca las carcasas igual que los botines: al sol, en un lugar ventilado o con secador de botas, pero nunca sobre una fuente directa de calor.

Después de unas 24 horas, cuando todo esté completamente seco, vuelve a montar tus botas y ajústalas con los cordones o el sistema de cierre. Esto ayuda a que mantengan su forma durante el almacenamiento. Puedes meter papel de periódico en los botines para asegurarte de que la puntera interior se seque del todo.

¿Cómo cuidar tus botas y botines de snowboard?

Estos consejos de mantenimiento ayudarán a que tus botas se mantengan en buen estado y te protejan de los elementos durante más tiempo.

Durante el invierno

Saber cómo secar tus botas correctamente es fundamental para alargar su vida útil y conservarlas en buen estado. Para un secado óptimo, sigue estos pasos:

1. Saca los botines de las carcasas y sécalos por separado.
2. Sécalos al sol, en un lugar bien ventilado o con un secador de botas. Nunca los pongas directamente sobre una fuente de calor.
3. Una vez secos, vuelve a montar las botas y ciérralas para conservar su forma.

Para prolongar la vida de tus botas a medida que se desgastan, ten en cuenta estos consejos:

• Si tus botas están muy blandas o ya no se ajustan bien, consulta con un especialista para instalar refuerzos como J-bars, C-bars o lengüetas rígidas.
• Camina sobre nieve en lugar de asfalto siempre que puedas, para conservar las suelas de goma blanda.
• Evita apoyar la tabla sobre la bota mientras estás sentado en el telesilla. En su lugar, mete la puntera debajo del talón del binding.
• Si siempre tienes los pies fríos en la montaña, coloca una capa de papel de aluminio debajo de la plantilla para reflejar el calor hacia el pie.

¿Cómo guardar las botas de snowboard?

Lo más importante para guardar tus botas de snowboard es asegurarte de que estén completamente secas antes de almacenarlas. Para ello, sepáralas y déjalas secar durante al menos 24 horas antes de volver a montarlas. Abrocha los cordones y todos los sistemas de cierre para que mantengan su forma durante la temporada baja.

¿Cómo evitar el mal olor en los botines?

El mal olor en las botas de snowboard es causado por bacterias que proliferan en ambientes húmedos. Por eso, tu primera línea de defensa es secarlas bien utilizando los pasos anteriores.

Otros consejos incluyen el uso de polvos absorbentes para eliminar el exceso de humedad. Puedes aplicarlos antes y después de cada salida para mantener los pies y los botines secos.

Si el olor es muy fuerte, lo mejor es lavar las botas como se indica en este artículo, asegurándote de eliminar bien las bacterias causantes del mal olor.

¿Cuándo deberías cambiar tus botas de snowboard?

Llegará un momento en el que tus botas ya no cumplan su función como deberían y sea hora de renovarlas.

Es momento de cambiarlas si:

• Filtran agua por grietas en la carcasa, la suela o las costuras.
• Se han estirado tanto que parecen una talla más grande.
• No conservan el calor porque el botín está demasiado aplastado.

Las botas de snowboard están diseñadas para mantenerte abrigado, seco y darte el soporte que necesitan tus tobillos para girar sobre la tabla. Ahora que sabes cómo cuidarlas, puedes alargar al máximo su vida útil y aprovechar al máximo tu inversión. Como todo equipo, tienen un ciclo de vida, y llegará un punto en el que lo mejor será invertir en unas nuevas. Cuida tus pies y sigue disfrutando de la nieve más tiempo.

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